Viernes, 09 Marzo 2018 12:52

Reporte Especial – Transformación digital: progreso y realidad en México

Lo que hoy conocemos como “transformación digital” es en realidad un efecto largamente esperado. Algunos investigadores la explican como una consecuencia de un progreso tecnológico al interior de las organizaciones que debe pasar primero por la digitization, que es la conversión de la información analógica a formato digital (numérico y binario); la digitalización, que es el “proceso” real del cambio tecnológicamente inducido, el cual ha dado origen a soluciones como el Internet de las Cosas, Industria 4.0 o Big Data; para finalmente llegar propiamente a la transformación digital, entendida como el efecto social total y global de la digitalización.

De esta manera, la digitization (la conversión), la digitalización (el proceso) y la transformación digital (el efecto) pueden acelerar los procesos de cambio en la sociedad, ya existentes y en curso, tanto horizontales como globales.

Es evidente que se trata de un concepto en cuyo entorno existen coincidencias y discrepancias. Incluso la definición del mismo sigue siendo polémica y variada, por lo que en este Reporte Especial se propuso que la transformación digital es la reinvención de una organización a través del empleo de la tecnología digital para mejorar la forma en que la organización se desempeña y sirve a quienes la constituyen.

Jorge Gómez, Enterprise Leadership de IDC México.

Para ofrecer un panorama más integral sobre la realidad de este concepto en nuestro país, CIO México entrevistó a firmas analistas y consultoras del mercado TIC en nuestro país, a proveedores de reconocida presencia y a empresas que también están incursionando con soluciones específicas para atender este floreciente y prometedor mercado.

Jorge Gómez, Enterprise Leadership de IDC México, explica que el proceso de transformación digital es una especie de círculo virtuoso donde están presentes un factor económico, un cambio generacional y un tema tecnológico. “Estos tres interactúan de alguna manera para formar y acelerar la visión tecnológica o inclusive generar nuevas tecnologías”.

¿Cómo estima IDC que será la adopción de este proceso en cada componente de la llamada “Tercera Plataforma”, un término propuesto por la misma firma? De acuerdo con Gómez, en términos de la Analítica, se calcula un crecimiento de un 16% en México para los próximos años. “Esto es significativo si se compara con el crecimiento anual de 2.5% que está teniendo la industria de las TI en promedio”. Más aún, el cómputo en la nube tendrá un incremento de entre el 25 y el 28%, lo cual contrasta con la tasa de incremento de servidores que es menor al 1%. Por lo que corresponde a redes sociales, manifiesta que el 32% de los usuarios de este tipo de enlaces espera que el tiempo de respuesta a sus quejas sea menor a una hora y el 74% considera que es una obligación moral hacer público el reclamo por recibir un mal servicio. Finalmente, en el rubro de movilidad, el analista señala que durante 2016 se vendió un Smartphone cada segundo, en promedio. “Por lo tanto, podemos afirmar que la primera experiencia en Internet que tuvieron la mayoría de los mexicanos no fue en una computadora, sino en un teléfono móvil”.

Denyson Machado, vicepresidente de Seguridad para América Latina de CA Technologies.

Factores de negocio

Un proceso de transformación digital consiste en la búsqueda por encontrar mejores formas para hacer la interacción entre una organización y sus clientes, según la definición de Denyson Machado, vicepresidente de Seguridad para América Latina de CA Technologies. “En este proceso de búsqueda constante de innovación empieza con una idea, y la primera preocupación que se tiene es cómo, con agilidad, se puede transformar esa idea en resultados y dentro de un tiempo corto”.

Por su parte, José Luis Varela, Vicepresidente de IT Transformation en Oracle de México, destaca tres aspectos en este sentido, uno de ellos, muy interno y a nivel de proceso, es de la innovación; otro constituye una palanca muy fuerte hacia el exterior de las compañías e inclusive los organismos gubernamentales como son los clientes y los ciudadanos, respectivamente; y el tercero, constituido por las estructuras de costos, es el que habilita que las organizaciones adopten procesos de transformación digital. Ante ello, asevera que “deben hacerlo sin opción, pues no hay alternativa en este momento, y lo que hay que decidir muchas veces es el cómo y el cuándo algunas de las iniciativas comienzan a ser aplicadas”.

Aspectos que debe abarcar

En opinión de Rafael Solares, Director General de VMware en México, son cuatro los pilares básicos que debe tener una estrategia de transformación digital: 1) tener un centro de datos moderno, “que rompa los silos de información que existían antes para compartir los recursos disponibles, según se vayan demandando”; 2) la integración de nubes públicas, “ya que para nosotros el futuro será de nubes híbridas”; 3) el fortalecimiento del trabajo digital; y 4) la transformación de la seguridad.

José Luis Varela, Vicepresidente de IT Transformation en Oracle de México.

Para Carlos Arochi, Director General de Hitachi Vantara en México, los aspectos que debe abarcar la transformación digital se dividen en tres rubros: “el primero es el de operaciones y procesos, que se refiere a cómo poner una solución en el mercado de manera eficiente en términos de costos, tecnología, y tiene que ver con la automatización del proceso, la movilidad de la fuerza de trabajo y eficiencia en la cadena de suplementos. El segundo es el relativo a la experiencia que tengan nuestros clientes para que las soluciones obtenidas ofrezcan más ventajas frente a sus competidores en cuanto a sencillez y rapidez. El tercer rubro es la generación de nuevos modelos de negocio”.

Algunas empresas proveedoras han acompañado a grandes organización para efectuar procesos completos de transformación en sus áreas de TI, “para llevar toda su operación hacia la nube, lo que les ha permitido tener reducciones a nivel operativo entre 35 y 40% de lo que tradicionalmente ha sido su costo de operación”, afirma Varela, de Oracle.

Sin mencionar nombres, refiere a algunas empresas mexicanas del sector de bienes de consumo con presencia mundial,  cuyos ahorros operativos cercanos al 35% se han transformado en proyectos de Big Data, de investigación y desarrollo de nuevos productos, en aplicaciones de movilidad e incluso servicios de chatbots.

Rafael Solares, Director General de VMware en México.  

Riesgos asociados

Lo expuesto por los entrevistados reafirma o pone en evidencia diversas áreas de oportunidad relacionadas con este proceso. Sin embargo, como en todo ámbito tecnológico, existen riesgos asociados, como afirma Solares, de VMware. “Minimizar el impacto que tiene este cambio, así como la responsabilidad que tiene el área de TI para liderar la transformación digital es el principal riesgo”, advierte el directivo.

Otros, como Machado, de CA Technologies, reconocen que es difícil hacer un balance entre comodidad y seguridad, ya que los clientes, dice, buscan ambas, y se les deben entregar aplicaciones fáciles de manejar, pero también con seguridad transparente para ellos.

Para Abelardo Lara, Director General de Veeam México, el mayor riesgo de efectuar un proceso de transformación digital es no tener respaldada la información o no se cuente con una solución de alta disponibilidad, “ya que tal carencia, el final del día, impactará en las ventas, en los clientes y en la imagen que tenga la organización”.

Carlos Arochi, Director General de Hitachi Vantara en México.

Asimismo, la oferta tan amplia de soluciones disponibles que hay en el mercado respecto a este proceso, puede considerarse también como un riesgo, pues hay que lograr que las soluciones de varios proveedores convivan entre sí para lograr un objetivo, como argumenta Alejandro Lomelín, Director de Ventas para Soluciones de Data Center de HPE México. “En ocasiones, entre lo que resuelve un proveedor y lo que ofrece otro pueden quedar huecos en medio no resueltos. Una solución podría ser que las organizaciones definieran una estrategia unificada para de esta forma reducir la cantidad de proveedores involucrados”. Saber muy bien con quién se invierte para que sea una tecnología que tenga permanencia en el futuro es también de mucha relevancia, agrega Lomelín. “Un riesgo sería no invertir en las tecnologías correctas”.

Por su parte, Alejandra Pineda, Directora de Gobierno, Riesgo y Cumplimiento de la empresa mexicana Opitimiti Network, aconseja no descuidar los retos que representa la transformación digital en materia de seguridad de la información. “Los temas de actualidad como ransomware (WannaCry, Badrabbit), ataques de denegación de servicio, ciberguerra y las campañas dirigidas demandan cambiar el enfoque de la seguridad para que sea proactivo y no reactivo como ocurre actualmente”, señala.

Abelardo Lara, Director General de Veeam México.

Entre las amenazas que puede sufrir una organización que esté en plena transformación digital as campañas de ataques dirigidos que afectan las infraestructuras críticas de las organizaciones, filtración o robo de la información, agrega Javier Luna, Director de Ingeniería de Optimiti Network. “También existe el riesgo de que las organizaciones crezcan de forma no estructurada y se vean envueltas en incumplimiento normativo y legal, o bien, que haya falta de control de dónde se alberga la información que se genera como parte de esta transformación digital en términos de geoubicación”. En su opinión, la falta de capacitación y el no involucramiento del personal de las organizaciones en este proceso constituyen figuran entre los principales riesgos asociados.

En ello coincide Solares, de Vmware: “La transformación digital, la estrategia tecnológica constituye sólo uno de los componentes. Es necesario pensar también en la transformación de los procesos y de las personas, pues para cada uno de nosotros, como colaboradores de una organización, se modificará nuestro rol una vez que el proceso haya permeado a todas las áreas”.

Áreas beneficiadas

Uno de los principales retos que tiene un área de TI es cómo puede responder al incremento cada vez mayor de los requerimientos de la empresa con presupuestos que van a la baja.

Alejandro Lomelín, Director de Ventas para Soluciones de Data Center de HPE México.

“Las áreas de la organización que están más en contacto con el cliente son o deben ser las más beneficiadas con el proceso de transformación digital, pues como usuarios cada vez estamos más acostumbrados –e incluso exigimos– para que las compañías con las que interactuamos entreguen servicios de manera inmediata en nuestro dispositivo móvil sin fallas, conozcan nuestras necesidades y los productos que tenemos contratados con ellos”, explicó Solares.

“Hace 15 años el director de Sistemas era quien tenía el presupuesto y sabía dónde y en qué invertir. Hoy los dueños de los presupuestos son normalmente los usuarios, de manera que hay que conversar con ellos y apoyarles en este proceso de transformación digital”, manifestó Lara, de Veeam.

Enfoque de las inversiones en DX

Desde la perspectiva de Hitachi Vantara, las inversiones relativas a la transformación digital en México se destinarán hacia cuatro rubros: “el primero –que me parece es el más avanzado– es el manejo de la información o data management, que constituye entre el 70 y 80% de la inversión en las organizaciones, lo cual hará crecer el gobierno de datos, que es el segundo rubro, el cual tiene que ver con quién, cómo y cuando los puede accesar tales datos tanto en el data center como en las sucursales, dispositivos móviles y los mismos clientes; el tercer rubro es la movilidad de datos, que consiste en hacer que la información que ya se tiene almacenada y gobernada sea accesible de manera remota ya sea en la nube, en una aplicación o en un dispositivo desde alguna sucursal, que constituye entre el 5 y 10% de las inversiones; y el cuarto rubro es el data analytics, cuya inversión por parte de las empresas hoy no alcanza el 5%, pero vislumbramos que hacia el año 2022 será el que más crecimiento tenga. “Calculamos que cerca del 2020, ya con un modelo de transformación digital completamente adoptado, el tema de analytics y el aprovechamiento de la información podría representar hasta un 40% del presupuesto de las áreas de TI”, pronostica Arochi, de Hitachi Vantara.

Alejandra Pineda, Directora de Gobierno, Riesgo y Cumplimiento de Opitimiti Network.

Mayor reto de los CIO en México

En el pasado, era común que se hablara respecto a cómo hacer más eficientes los procesos organizacionales mediante la tecnología, en cambio hoy tenemos que hablar de cómo generar ingresos con los recursos tecnológicos, afirma Lomelín, de HPE.

Para Pineda, de Optimiti Network, uno de los desafíos de un CIO es alinear los objetivos de TI con los objetivos estratégicos del negocio. “Esto le permitirá actuar y participar de manera natural, rápida y justificada en cada una de las propuestas que determinará la transformación digital”.

Incluso el concepto puede ir más allá para transformar el papel de los CIO. “Ellos pueden salvar o reinventar sus organizaciones en el mundo que vivimos, porque las que no lo hagan tendrán un futuro diferente al que quieren tener”, como advierte Noam Bizman, Vicepresidente para Latinoamérica de ServiceNow.

Javier Luna, Director de Ingeniería de Optimiti Network.

Por su parte, Abelardo Lara, de Veeam, advierte que el mayor reto que tiene un CIO es satisfacer los requerimientos de las áreas usuarias. “El 80% del presupuesto que tienen los departamentos de TI se ocupa para mantener el negocio operando y sólo el restante 20% pueden destinarlo a invertir en nuevas tecnologías o soluciones. Deben por ello ser mucho más eficientes y con menos recursos; he ahí su mayor desafío”.

Dejó de ser una moda

Según Mauricio García-Cepeda, Director General para México y MCA de Service Now, transformación digital es la reinvención de las organizaciones a través de la adopción de nuevas tecnologías para tener mayores ingresos, menores costos y/o gastos mediante la eficiencia operacional buscando siempre la experiencia final del cliente y del empleado”.

Lo importante, como agrega Bizman, de ServiceNow, es que las empresas proveedoras contribuyan a transformar la esa visión en realidad. “Si como ejecutivo se tiene la visión de dar este tipo de experiencia a los empleados y a los clientes, se puede llevar esta visión en una realidad en cuestión de días hasta ocho semanas, con poco riesgo, rápido y un retorno de la inversión de hasta tres dígitos en sólo siete meses, en la mayoría de los casos”.

Mauricio García-Cepeda, Director General para México y MCA (Izq.), y Noam Bizman, Vicepresidente para Latinoamérica, ambos de ServiceNow.

Gómez, de IDC, insiste en que la transformación digital no es una moda tecnológica. “No es como cuando nos hablaban de la arquitectura cliente/servidor; se trata de un fenómeno que va más allá de la tecnología y que involucra aspectos de índole económico y social”.

Finalmente, el éxito de la transformación digital pasa por una transformación de conocimiento importante, de la cual todos somos responsables, tanto quienes proveemos tecnología, como los que ayudamos a educar a socios y clientes, e incluso los medios de comunicación, todos ayudan a que la transformación digital no se vea como algo que ocurrirá en algún momento. “Ya se dio, es una realidad, afirma Varlela, de Oracle. “Ahora lo importante es cómo maximizarla para hacer más negocios y relacionamientos a través de las herramientas que ya se proveen”.

¿En qué etapa de transformación digital se encuentra su organización?

IDC ha definido un marco referencial para saber cuándo una organización está avanzando en términos de transformación digital. En este espectro se incluyen desde aquellas compañías que consideran que la transformación digital “no existe”, “no es para mí”, “es sólo una moda” (equivalente a un 6% de las organizaciones en México con esta mentalidad, un porcentaje alto en comparación con el 1.5% o menos que se reporta en Estados o Europa), hasta organizaciones consideradas como “disruptoras”, pues han cambiado radicalmente su modelo de negocio.

Entre ambos extremos, la firma de consultoría ha clasificado diversas etapas de los centros de datos dentro del proceso evolutivo de la transformación digital: en primer término están los centros de datos “arcaicos”, instalados en empresas que no invierten en DX;  luego están los centros de datos “estáticos”, en los cuales ya se ha invertido un poco para lograr la DX, por lo que el interés radica en disminuir costos mediante la consolidación de infraestructura, por ejemplo, pero las iniciativas de transformación digital se realizan algunas área de la organización, son aisladas y sin una estrategia común; en seguida está el centro de datos “transformacional”, cuya organización ya se ha dado cuenta que la transformación digital es un imperativo de negocio, el área directiva de la misma ya toma cartas en el asunto y los proyectos son encabezados por un responsable que puede llamarse Chief Digital Transformation Officer o algún equivalente, quien busca sinergias para utilizar tanto capacidades propias como de terceras compañías. “La mayoría de las organizaciones que están adoptando la transformación digital están en esta etapa”, aseveró Jorge Gómez, Enterprise Leadership de IDC México. En el sector bancario, por ejemplo, las instituciones ofrecen aplicaciones móviles para que los cuentahabientes conozcan sus saldos, hacer pagos, etc., pero todavía requieren que éste acuda a una sucursal para solicitar algunos servicios.

La siguiente etapa en el proceso evolutivo la constituyen compañías “flexibles”, que pueden entregar una experiencia completamente digital a sus clientes o usuarios. Los responsables de implementar tal proceso utilizan métricas muy sólidas y las decisiones de inversión en tecnología ya no están  relacionadas con el centro de datos cual si fuera un solo centro de costos, sino tiene que ver con la agilidad para la toma de decisiones. Asimismo, los recursos son vistos como un pull para repartirlos de forma dinámica conforme vayan saliendo o iniciativas.

Finalmente, está el centro de datos “dinámico”, que corresponde a organizaciones disruptivas. “En esta etapa no se concibe al datacenter como un edificio, sino como un proveedor o facilitador de recursos tecnológicos ubicuos y cuyas capacidades pueden estar en el edificio o fuera de él. Apenas entre 3 y 4% de las organizaciones que están adoptan la transformación digital en México se encuentran en esta etapa”, afirmó Gómez.

Last modified on Viernes, 09 Marzo 2018 13:37